A Guarda quiere superar los 120 kilos de langosta por puesto que logró en 2019

Más de un millar de personas, entre vecinos y visitantes, se dieron cita anoche en la carpa gastronómica de la XXX Festa da Langosta e da Cociña Mariñeira para degustar los distintos platos preparados por restaurantes de la zona en los que la langosta reinó en fogones y mesas. La perfecta organización del evento evitó las colas y, desde las ocho de la tarde hasta las doce de la noche, fueron desfilando familias y grupos de amigos que dieron buena cuenta de un menú muy variado (langostas, nécoras, mejillones, paellas marineras…) y con claro sabor a mar. Este año, los restauradores representados en la carpa se han marcado como objetivo superar los 120 kilos de langosta por puesto vendidos en 2019 y, tal y como marchan las cosas, dicha meta es totalmente factible.

Y mientras en el puerto se nutrían los estómagos, en la Plaza do Reló se buscaba otro tipo de emociones con el concierto inaugural del Mar de Blues. Un festival que contó con nombres propios del panorama internacional como Marcos Coll, uno de los mejores armonicistas de las últimas décadas; Will Jacobs, guitarrista, compositor y cantante con una dilatada carrera forjada en los escenarios de Chicago; o Julian Vaughn, una eminencia del Jazz y del Blues que ha tocado con grandes como B.B. King. También estuvieron en el escenario Javier Vacas, gran bajista de estilo propio, y Javier Turnes, reconocido guitarrista y fundador de la banda gallega Bakin’ Blues Band.

Pero no sólo el puerto y la plaza del Concello fueron escenario de la fiesta popular. Los locales de la zona disfrutaron también de un recuperado trajín,  al igual que los hoteles y pensiones, que rememoraron por obra y gracia de la Festa da Langosta e da Cociña Mariñeira un dinamismo previo a la pandemia.

Artesanía, vermú mariñeiro y exposición etnográfica 

La mañana del sábado fue ajetreada en A Guarda. A primera hora, ya comenzaban los preparativos en la carpa y en la rúa do Porto con la instalación de las casetas de artesanía. Por su parte, la tripulación del Piueiro revisaba el volanteiro para dejarlo listo para los viajes del fin de semana -a partir de las cuatro de esta tarde comienzan los recorridos a bordo de la embarcación tradicional- y los locales de la zona, a ritmo de pasacalles, despachaban los vermús mariñeiros para los más madrugadores.

En la Plaza do Reló, los pequeños disfrutaban de una masterclass sin precedentes con los concertistas de Mar de Blues y teniendo como testigo de excepción a la langosta cangrexa. La mascota nació este año para cumplir el 30 aniversario de la fiesta y, aunque se concibió como un divertimento para los más pequeños, se ha convertido en uno de los grandes atractivos del evento guardés al ser solicitada por pequeños y mayores para el ya típico selfie.

Por su parte, el alcalde, Antonio Lomba, participaba a mediodía en la inauguración de la Exposición Etnográfica Mariñeira de la Asociación Piueiro, que ya se encuentra abierta al público y que permitirá entender mejor el objetivo de esta asociación, destinada a la recuperación de la tradición cultural marinera.

Mañana domingo, los visitantes podrán participar en la ruta de las cetarias y del Museo del Mar, reservando previamente sus plazas en el correo festadalangosta@gmail.com  o en el punto de información ubicado en la carpa instalada en el puerto de A Guarda. Los pasacalles a cargo de grupos locales seguirán animando el vermú marinero, que se puede probar en un gran número de establecimientos hosteleros de A Guarda. La música, en este tercer y último día de fiesta, la pondrá Erea Castro, con una actuación en la Plaza de San Benito, mientras que el grupo “A Boalleira” amenizará musicalmente la despedida entre el puerto y la carpa.

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